jueves, 12 de marzo de 2015

El amor y las vidas pasadas

Quiero compartir el comentario que escribió Siuking Rojas en la entrada, Recuerdos o retazos de alguna de mis vidas pasadas. Me parece muy interesante lo que describe. Y sin más, os dejo con él.  

Siuking Rojas, (...) Me ocurre algo bien particular: cuando conocí a mi actual novio, ambos experimentamos una atracción inmediata, como si nos conocieramos desde siempre. Un día, con el pasar de los años, le conté que hace años, cuando yo era pequeña, recordé quien fui en mi vida pasada (arriegándome a que me creyera loca, claro), le comenté que según mis visiones, fui una indígena chilena -Mapuche-, que corría ante la llegada de los invasores españoles. Recuerdo que llegaba a la orilla del mar, cerca de unas rocas, y fue donde escuché un par de balazos, mas no el dolor. Caía de cara al borde de la playa y el agua humedecía mi cara y pelo. Antes de dormirme, recuerdo las patas de un caballo blanco y las botas negras de un hombre sobre él.
Curiosamente mi novio me miró algo asustado y me cuenta que él recuerda algo parecido también de su vida pasada: se recuerda sobre un gran caballo blanco, con el peso de un arma sobre el hombro y su traje. Dice que se acerca a la playa, junto a las rocas, y que mira la tranquilidad del mar junto a las varias personas muertas en el borde de este. Dice que le llama la atención una mujer, ya muerta, con sus ojos abiertos mirando en su dirección. Dice que siempre la recuerda, con tristeza y melancolía, siempre la misma imagen, aquella mujer mirándolo.
¡¡Wow!! ¡Ambos sentimos escalofríos! ¿Es posible que esta conexión este dada de esta manera? Digo, somos como agua y fuego, completamente diferentes, y creo que siempre lo hemos sido, pero, ¿Es posible que dos personas se reencuentren en sus vidas? ¿Será un mal augurio?
Su descendencia es española, desde siempre. Y a eso de hace un año, con mi familia nos hemos enterado que somos descencientes directos de los Mapuches, siendo yo, la tercera generación. ¡¿Cómo es posible?! (...). 

¿Por qué me parece interesante? Podemos recordar partes de una o varias vidas que hemos vivido; lo complicado suele ser, encontrar a otra persona que tenga la misma vivencia o recuerdo del mismo hecho y que ambos coincidan.

La esencia que somos, es eterna. Podemos cambiar de cuerpo, en cada vida tenemos uno distinto, pero el alma que lo habita, es la misma. La información, el aprendizaje de lo que vivimos en cada una de ellas, queda almacenada, la guardamos y puede aparecer en otra vida distinta, ya sea como un recuerdo, un don, facilidad para aprender o desarrollar una habilidad, etc.

¿Por qué Siuking y su pareja recuerdan el mismo hecho, el mismo momento de una vida pasada? Lo más probable es que no sea la primera vez que se reencuentran a lo largo de sus vidas. Su lazo de unión es importante y "buscan" el encuentro para vivir o retomar sus vidas a partir del instante en el que lo dejaron. Una especie de punto y seguido dentro de la eternidad. La muerte les separó físicamente en aquella vida, pero en ésta se han vuelto a unirse, dándose así, la oportunidad de vivir su amor. 

Si dos personas han de reunirse para vivir una experiencia determinada en la vida, da igual que vivan a miles de kilómetros de distancia, tarde o temprano, acabarán por encontrarse. ¿Destino, plan del alma? Para mi, sin duda, se debe al plan del alma, a lo que el alma quiere y desea vivir en cada encarnación. Y el destino, son las circunstancias que ayudan a que se logre su propósito.

Cuando leí el comentario, recordé el libro Lazos de amor de Brian Weiss. Siuking, si lo lees, te darás cuenta de que no eres la única persona que ha experimentado una vivencia similar. 

Es una experiencia muy bonita el tener la oportunidad de recordar, sentir y tener la certeza de que la vida es eterna, de que el amor une y no desaparece. A lo largo de nuestras encarnaciones iremos encontrándonos con muchos seres con los que tuvimos contacto en otras vidas, aparentemente partiendo de cero en cuanto a los recuerdos, pero sintiendo que hay algo, lazos invisibles que nos unen para siempre.


La imagen está tomada de internet y desconozco quién es su autor.